jueves, 8 de mayo de 2008

árboles

Creo que esta poesía vale la pena
Petty
··· La vida de un árbol merece nuestra devoción
y nuestr más grande regocijo.
Al amparo gozoso de su sombra
acariciados por la tibieza de la luz del sol,
y acunados po el sonido mágico e irrepetible
de su follaje mecido por la mano invisible del viento,
estaremos a salvo de la alienación y de la orfandad,
siempre y cuando seamos capaces
de apreciar esa gloria,mientras nos sea posible,
y de reconocer en ella nuestra mayor riqueza
Eduardo Galeano